Cueva de los Órganos. Localizada en Mollina se trata de una de las cuevas más cómodas y amplias para la realización de la espeleología.
La cueva de Los Órganos debe su nombre al sonido que los espeleotemas del interior emiten al ser tocados. Se trata de una cavidad con amplias galerías, grandes bóvedas y multitud de formaciones en su interior por lo que su aplicación a la espeleología es muy didáctica y divertida. Además, cuenta con una pequeña colonia de murciélagos muy activa durante el verano. Un kilómetro de bellas salas y rincones en los que deleitarse de la belleza que nos aguarda en el mundo subterráneo.
boca de entrada vista desde el interior
está cerrada por los destrozos que causan algunos desaprensivos
No es necesario usar técnicas de espeleología. Se necesita iluminación, buen calzado y descender con bastante precaución las rampas y resaltes.
sala principal de los organos
Su desarrollo alcanza el kilómetro y su profundidad es de 102 metros.
entrada a la cueva vista desde el exterior
David explorando por todos los agujeros que encontraba